Muchos bebés pequeños lloran bastante, sobre todo por la tarde y por la noche. Es lo que se llama cólico del lactante. No se sabe por qué ocurre y suelen empezar después de los quince días, al mes y medio es cuando más lloran, y hacia los tres meses se les suele pasar.
Ningún tratamiento único ha demostrado hacer desaparecer el cólico. Sin embargo, existen formas de disminuir y calmar el dolor, de hacer que la vida sea más fácil, tanto para usted como para su bebé con cólicos.
En primer lugar, si su bebé no tiene hambre, no intente continuar alimentándolo. El hambre y los cólicos del lactante no tienen relación. El bebé con cólicos no llora por hambre. Es posible que no acepte nada y siga llorando. En lugar de eso, trate de consolar a su pequeño; no estará «malcriando» al bebé con la atención. Si tu bebé tiene cólicos, la mejor manera de calmarle será cogerle en brazos, cerca del cuerpo. Acunarle suavemente, cantarle, llevarlo junto al cuerpo en mochila o chal… ayudarán a disminuir la intensidad del llanto. Se sabe que se puede aliviar llevándolos mucho en brazos (algunas madres optan por llevarlos todo el día colgados en una bandolera), dándoles el pecho a demanda, cantándoles, haciéndoles mimos y durmiendo con ellos.
La mejor postura para aliviar los cólicos es manteniendo al bebé incorporado, con la cabeza elevada, sobre el hombro de quien lo sostiene. El «canguro» portabebés es muy eficaz. Algunas madres prefieren sujetar al bebé con un fular portabebés.
También puede:
- Intentar hacer eructar al bebé con más frecuencia durante las comidas.
- Colocar al bebé a través de su regazo sobre su estómago y frotarle la espalda.
- Caminar con su bebé o sentarse en una mecedora, probando diversas posiciones.
- Otros bebés se calman boca abajo. Puedes colocar a tu bebé sobre el antebrazo o sobre las rodillas. Si le sitúas sobre tu pecho, el contacto corporal será mayor.
- Para algunos padres es muy eficaz acostar al bebé con ellos.
- El calor ayuda a aliviar los cólicos del lactante: se puede reducir la intensidad del llanto del bebé con cólicos aplicando un poco de calor sobre su piel. Colocar al bebé sobre una bolsa de agua templada o cubrirle con una manta previamente calentada puede servir para aliviar su llanto.
- Para aliviar los cólicos, la mejor solución sigue siendo el contacto piel con piel. De este modo, el bebé con cólicos percibe, además del calor, la proximidad de su madre, contribuyendo todo ello a darle una sensación de protección que le ayudará a calmarse.
Efectos de los masajes en el bebé con cólicos del lactante:
Muchos padres intentan dar masajes en el abdomen del bebé. Bien con su propia mano, bien flexionando los muslos del bebé sobre su tripa. Ambas cosas pueden ayudar a ventosear al bebé si lo necesita. Sin embargo, lo más probable es que el bebé con cólicos siga llorando aún después del masaje.
Otros prefieren dar un masaje por todo el cuerpo, untándose las manos de crema hidratante o aceite vegetal. Esto es una costumbre procedente de culturas orientales.
Cuidar a un bebé con cólicos puede ser extremadamente frustrante, así que asegúrese también de cuidarse usted.No se culpe a sí misma ni al bebé por el llanto constante; el cólico no es culpa de nadie. Intente relajarse, y recuerde que su bebé superará esta fase finalmente.
Mientras tanto, si necesita un descanso del llanto de su bebé, tómeselo. Los amigos y familiares a menudo cuidarán al bebé con gusto cuando necesite algo de tiempo para usted misma. Si no hay nadie disponible inmediatamente, está bien colocar al bebé en la cuna y tomarse un descanso antes de hacer otro intento de consolarlo. Si en cualquier momento siente que podría lastimarse a sí misma o al bebé, coloque al bebé en la cuna y pida ayuda inmediatamente.
Si el bebé tiene temperatura de 38° C o más, si llora durante más de dos horas a la vez, si está inconsolable, o menos despierto o alerta que lo habitual, llame a su médico inmediatamente. También debe llamar a su médico si no está segura de si el llanto de su bebé se debe los cólicos o si es un síntoma de otra enfermedad.
Y recuerda: Lo más eficaz es el contacto físico. Algunos bebés aceptan el pecho cuando tienen cólicos, aunque no sea «su hora». El pecho no solo brinda alimento, sino también calor y consuelo. Lo que de veras le sirve al niño es el contacto. Aunque no llegue a calmarse.